Latin America Magazine.

by Julienne Weegels

La cocina nicaragüense cuenta con varias delicias regionales y siendo bien tropical
aun siendo sencilla es muy deliciosa! Se puede vivir comiendo en la calle porque en cada calle y cada esquina de cada barrio se encuentran pulperías con sus ventas de frescos, panaderías, fritangas de buena fé, bufetes para quien tenga alguito más y claro que también las vendedoras de tortillas que caminan gritando ‘tortiiiiiiilla!!’ Se vende de todo en todos lados y solo es asunto de descubrir donde venden los mejores frijoles cocidos, el mejor cacao o los más ricos elotes. El mercado de cada ciudad es más definitivamente donde se come lo mejor, de carne en baho hasta sopa de gallina con albondigas, de chancho con yuca hasta arroz aguado.

Cuando nació la idea de “La Fritanguita de la Lleca” y con ello la locura de
preparar una comida 100% nica para un volkskeuken (cocina popular) recaudativo para Lleca (teatro en la cárcel, Nicaragua) no salió nada facil
encontrar los ingredientes apropiados para alcanzar el típico sabor de
Nicaragua! Dónde p*** encuentra uno Maseca acá? Naranja agria, yerba buena o
achiote? Sin hablar de pozol, pinolillo ni chicha! Muchas veces por ser tan
exótico no se importan estos productos o son mucho más caro de lo que uno
usaría para ‘comida de la calle’. Pensá por ejemplo en frutas para hacer
deliciosos frescos como pitaya, maracuya y melocotón (sterfruit).

Nos salvaron el pellejo las ventas de verdura surinameñas, turcos y
africanos en los mercados del este de Ámsterdam – Dappermarkt & Albert Cuyp
– y un famoso ‘toko’ que también vende productos mexicanos: Tjin’s Toko
(esquina del Govert Flinckstraat). Para el riquísimo e ínfamo Ron Flor de Caña
nos salvó la licorería Ton Overmars, el único en la región de Ámsterdam que
vende nuestro querido veneno!

Al final, para su primera edición “La Fritanguita de la Lleca” cocinó unas deliciosas
recetas de la tradición mestiza nicaragüense, como esta receta de Indio Viejo. La receta es empírica y la llevé grabadas en la memoria por frequentes visitas al mercado, la fritanga y la suegra! Las cantidades no son exactas, pues es un asunto de saborear e intentar.

Ingredienten:

Maseca, 1 tasa / Achiote, cucharita / Sal, cubitos maggi / Agua, al menos 1l / Aceite vegetal / Hierba buena / Naranja agria o limón, 1 / Chiltomos / Tomate, 1 / Cebolla, 1 / Ajo, 2 dientes / Chile, 1 / 1 libra de pollo o chancho o res / 1 Ayote

Bereiding:

Si hacés el indio viejo a como se debe con carne, cociná primero la carne (marinada en achiote, limón y ajo) y guardá el caldo. Desmenuza la carne y guardálo para mientras. Si cocinas el indio viejo vegetariano o prefieres usar caldo prehecho, calentá dos cubitos de maggi (verduras o pollo) en 500ml de agua. Ajuntá la tasa de maseca. Bate a una cremosa sustancia, ajuntándole más agua hasta que quede una sustancia cremosa. Ajuntále la cuchara de achiote, el jugo de naranja agria (o limón), sal y yerba buena. Dejálo cocinar, batiendo regular/constantemente. Ajuntále una buena cuchara de aceite vegetal. Se va a ir secando entre más se coce, a veces hay que ajuntarle más agua. Se sabe que la maseca está bien cocida cuando el color se vuelve un poco más intenso, también se puede saborear la diferencia. Freí en una olla aparte las verduras (tomate, chiltomo, cebolla, ajo, chile) en aceite, sumále condimentos y mezclálo con la masa del indio viejo. Si lo hacés con carne se le ajunta la carne a las verduras y se fríe tambien, luego se ajunta todo a la vez y se mezcla bien. El indio viejo debe quedar cremoso. Antes que sea una gran masa pastosa es mejor que quede algo aguado pero bien sabroso de condimento (achiote, limón, yerba, sal, chile). Buen provecho!